Dec 08, 2025
La Coruña volvió a convertirse del 5 al 7 de diciembre en uno de los epicentros mundiales del Salto de Obstáculos. Casas Novas, sede habitual de la Copa del Mundo FEI CSI5*-W, reafirmó una vez más por qué es considerado uno de los concursos indoor más especiales del calendario: ambiente único, nivel deportivo altísimo y una organización impecable que ya es sello de identidad de la familia Ortega.
La pista cubierta de Casas Novas reunió a varios de los mejores jinetes del ranking mundial, que llegaron a Galicia con un objetivo claro: sumar puntos decisivos para la liga europea de la Copa del Mundo. El diseño de Santiago Varela, siempre técnico y respetuoso con el caballo, planteó recorridos que exigieron precisión, equilibrio y una lectura fina de cada línea.
El público gallego, fiel y entendido, llenó las gradas desde el primer día, creando ese ambiente cálido y cercano que tanto destacan los jinetes internacionales cuando hablan de La Coruña.
El Gran Premio de la Copa del Mundo no decepcionó. La primera manga dejó claro que no habría margen para errores: barras que caían por pequeños despistes, cronómetros ajustados al milímetro y un puñado de binomios capaces de firmar recorridos limpios con autoridad.
El desempate fue un espectáculo en sí mismo. Velocidad, riesgo calculado y una tensión que se podía cortar. El ganador Willem Greve montando a Pretty Woman van't Paradijs N.O.P., firmó un recorrido impecable y rapidísimo, se llevó no solo los puntos FEI, sino también el reconocimiento de un entregado público.
Los representantes nacionales volvieron a contar con el apoyo incondicional del público. Casas Novas es, para muchos de ellos, una de las citas más especiales del año: competir en casa, en un cinco estrellas y ante una grada que vibra con cada recorrido, convierte cada salida a pista en un momento único.
Varios jinetes españoles firmaron actuaciones sólidas a lo largo del fin de semana, como Armando Trapote o Javier González Fraga, demostrando que el Salto nacional sigue creciendo en calidad y ambición.
Más allá del deporte, la Copa del Mundo de La Coruña es un punto de encuentro para profesionales, aficionados y familias. La atmósfera del recinto, la cercanía entre público y caballos, y la cuidada oferta de actividades paralelas hacen que el evento sea una experiencia completa.
Casas Novas ha logrado algo que muy pocos concursos indoor consiguen: mantener una identidad propia, reconocible y querida dentro del circuito internacional.
Con los puntos sumados en La Coruña, la clasificación de la liga europea se aprieta aún más. Cada etapa cuenta, y la parada gallega vuelve a demostrar que es decisiva en el camino hacia la Final de la Copa del Mundo.